Mis alumnos utilizan una libretita pequeña para anotar el vocabulario nuevo que va saliendo en las clases de inglés. Hace unos meses uno de ellos tuvo una idea genial. Trajo una agenda telefónica, que todo el mundo tiene por casa y ya nadie utiliza, para organizar el vocabulario alfabéticamente. La idea gustó tanto que ahora casi todos hacen uso de una agenda para recordar el vocabulario.
Es práctico, cómodo y más fácil de recordar.